ASAJA: la desafectación de vías pecuarias puede ‘comerse’ también terreno urbano.
En distintas zonas muy concretas y de forma muy reducida, la Consejería de Medio Ambiente quiere empezar ahora a “comerse” terreno urbano y ha iniciado para ello distintos expedientes de desafectación de vías pecuarias dentro de las ciudades y pueblos de distintas provincias andaluzas como en el caso de El “Cordel de la Fuente Grande” en la ciudad de Granada, El “Descansadero de la Era de San Blas” en la provincia de Jaén o la “Realenga de Vélez en el Rincón de la Victoria (Málaga), con el argumento de que “no soportan en la actualidad tránsito ni uso ganadero y por sus características físicas han dejado de ser adecuadas para el desarrollo de usos compatibles y complementarios”. Lo que realizará con esa ingente cantidad de metros de solares lo desconocemos a día de hoy pero sabiendo el proceder de la Junta de Andalucía nadie puede dormir tranquilo, dado que una desafectación no supone que la vía pecuaria desaparezca sino que ésta pierde su condición de bien de dominio público (bien imprescriptible, inalienable e inajenable) para pasar a ser bien patrimonial titularidad de la Administración. En el caso de una finca recalificada o que se vaya a recalificar en próximos planeamientos, o incluso nuestra propia vivienda o edificio estén en una vía pecuaria (véase el Camino de Ronda) podría llegar a decir que el terreno que ocupa nuestra casa deja de ser nuestro y pasa a manos de EPSA (Empresa Pública de Suelo de Andalucía). Si ya estábamos horrorizados por el proceder de Medio Ambiente en materia de vías pecuarias con el Plan de Recuperación de Vías Pecuarias, y en otras relativas a espacios protegidos o a la caza (Ley del Patrimonio y la Biodiversidad o la nueva Ley de Caza), mediante las cuales se permite apropiarse de una enorme cantidad de terreno rústico, ha empezado ahora a actuar también contra los bienes urbanos, vista la casi total impunidad de sus acciones hasta el día de hoy. Desde ASAJA-Granada, hemos intentado reunirnos con la Delegada de Medio Ambiente, Marina Martín, en múltiples ocasiones, para tratar de reconducir todos los desaguisados que en Granada se están cometiendo con las vías pecuarias (en el Cordel del Camino Real de Lorca, en Cúllar Baza; la Cañada Real del Camino Real de Sevilla-Granada, en Loja; la Cañada Real de los Potros, en Lugros, Iznalloz y Benalúa de las Villas o la Cañada Real de Huerta Majada en Íllora, entre otras), pero por desgracia nuestros intentos han sido baldíos. No descartamos, por tanto, iniciar movilizaciones para evitar los problemas causados a todos los propietarios (ya tanto rústicos como urbanos), y esperamos que la multitud de gente de las ciudades que observaba el problema con distancia reconsideren su postura al ver amenazadas sus propias viviendas y podamos hacer frente común a esta nueva vuelta de tuerca de Medio Ambiente. |
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