Cinco mil ovejas desfilarán el día 30 por el centro de la capital para celebrar la Fiesta de la Trashumancia.
Cinco mil ovejas desfilarán el 30 de octubre por el centro de la capital en la XVIII Fiesta de la Trashumancia, que celebrará en esta ocasión el Día de los Bosques y su compatibilidad con el pastoreo, según ha informado a Europa Press el presidente de la asociación Concejo de la Mesta, Jesús Garzón.
Las ovejas, procedentes de cinco ganaderías de Extremadura y de la Sierra de Madrid, irán acompañadas por 50 ó 60 vacas de Cantabria y de la Sierra de Gredos. La Fiestas de la Trashumancia está organizada por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino y la Asociación Trashumancia y Naturaleza.
Aunque la mayoría de las cabezas de ganado llegará en camiones, un rebaño de la localidad madrileña de Santa María de la Alameda y perteneciente a los hermanos Soriano será el único que llegará a la capital después de realizar su recorrido trashumante.
Garzón ha explicado que el rebaño salió el pasado 29 de septiembre en Brieva de Cameros, una localidad riojana donde pasó el verano. Posteriormente, atravesó el puerto de Piqueras y la provincia de Soria hasta llegar a la Comunidad de Madrid. Ayer martes, los pastores y su ganado durmieron en Buitrago de Lozoya, hoy miércoles se encuentran en Buitrago de Lozoya y mañana pasarán por Miraflores de la Sierra.
Las ovejas llegarán el viernes por la tarde al Cerro de la Covatilla de la Casa de Campo de Madrid, donde pasarán el fin de semana. El sábado se realizará una exhibición de perros pastores y otra de esquileo de ovejas previsiblemente en la zona del Lago.
La ruta pastoril comenzará a las 10 horas del domingo. La ganadería saldrá de la Casa de Campo, pasando por la Cuesta de la Vega hasta la calle Bailén. En torno a las 10.30 horas, entrará en la calle mayor hasta llegar a la plaza de la Villa.
UNA TRADICIÓN DE 25 MARAVEDÍES
Allí, siguiendo la tradición, el pastor mayoral entregará a un representante del Consistorio de la Villa y Corte matritense los 25 maravedíes –moneda española del siglo XV– estipulados por cabeza de en la Concordia entre los Hombres Buenos de la Mesta de los Pastores y los Procuradores del Concejo de la Villa de Madrid firmada el 2 de marzo de 1418 como pago para atravesar las dehesas y prados de la capital durante cuatro días, a razón de 50 maravedíes por millar.
Después, a las 11 horas, las ovinas llegarán a la Puerta del Sol, para partir luego por la calle de Alcalá hasta la plaza de La Cibeles, donde tienen previsto llegar a las 12 horas. Entonces, un grupo de ovejas desfilará por donde vinieron. Pasarán de nuevo por Sol, Mayor, Bailén y la explanada de la catedral de la Almudena y del Palacio de Oriente.
Allí, a las 13 horas habrá actuaciones de grupos regionales, música y danzas populares que representan a las diferentes comarcas trashumantes de España. El rebaño continuará por la Cuesta de la Vega y el Paseo de la Virgen del Puerto para regresar a la Casa de Campo, donde está prevista la entrada a las 13.30 horas.
Por otra parte, otro grupo de ovejas se quedará en Cibeles para continuar por la calle de Alcalá hasta la plaza de toros de Las Ventas.
En el desfile también participarán varios pastores, mientras que el rebaño estará dirigido por un mayoral o rabadán, que encabeza y guía la marcha, con sus correspondientes perros pastores, que se encargan de defender a los animales de osos, lobos y otros depredadores que se encuentran en el camino.
Les acompañan los llamados caballeros de la sierra, que merodean y limpian el camino que luego seguirán las ovejas para evitar pozos, puertas abiertas y controlar que las sendas a seguir sean las correctas. Por su parte, en los lados del rebajo se situará un pastor, un ayudante y un zagal, que se encarga de controlar el rebaño. Por último, y para cerrar el rebaño, se colocan los pendones de Castilla, que se dedicaban a evitar que las ovejas se dispersen o atraviesen campos sembrados.
UN POCO DE HISTORIA
La historia de la Trashumancia se remonta al rey Alfonso X El Sabio, que concedió en 1273 los privilegios al Concejo de la Mesta de los Pastores para que pudieran moverse libremente con sus rebaños, respetando las cinco cosas vedadas: panes, viñas, huertas, dehesas y prados de guadaña. El tributo de cinco ovejas por millar, que debían pagar los pastores a la Corona al atravesar los Puertos Reales en su viaje de primavera se convirtió en el ingreso más importante y regular del Reino de España, pues durante siglos transitaron anualmente por las cañadas de 3 a 5 millones de ovejas entre las montañas del norte y los valles del sur.
Además de la Concordia de los Hombres Justos de la Mesta, por privilegio concedido a Madrid a principios del Siglo XV por el rey Juan II, padre de Isabel la Católica, se instituyó la Feria de Ganados de San Mateo, que durante tres días se celebraba en la calle de Alcalá, que es cañada real o camino de cordel.
Se llamaba así porque los ganaderos, acogidos a los privilegios del Honrado Concejo de la Mesta, defendían sus derechos de paso con una copia de la Ley en la mano y con un cordel, que llevaba en sus puntas dos sellos de plomo, troquelados por el fiel contraste de pesos y medidas. El mayoral avanzaba delante del rebaño y en los lugares donde veía que habían dejado menor anchura de la pertinente, medía con el cordel el ancho de la calle, presentando ante la autoridad la denuncia correspondiente.
"Y alrededor del mercado los naturales medios de expansión y regocijo, los puestos de refrescos, vinos y aguardientes, alguna barraca, alguna rifa y la concurrencia de fulanitas al olor del dinero logrado por los tratantes en sus ventas de ganado" según narra José María de Mena en sus ‘Leyendas y Misterios de Madrid’.
Hasta mediados del siglo XX era habitual ver pasar por la calle de Alcalá en primavera y otoño los rebaños de ovejas merinas con sus pastores, que regresaban o se dirigían hacia Extremadura.