El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha comunicado a la Junta de Extremadura que la refinería Balboa, que se proyecta construir en Tierra de Barros, en plena Vía de la Plata, es “medioambientalmente inviable”. Se resuelve así un litigio iniciado hace nada menos que ocho años.

Alguien podría decir que el Apóstol ha escuchado las protestas que las asociaciones de Amigos del Camino de Santiago Vía de la Plata, reunidas en la Plataforma Refinería No, llevan haciendo públicas, con más bien poca trascendencia en la prensa nacional, para que no se ejecute la construcción de una refinería entre las localidades de Los Santos de la Maimona y Villafranca de los Barros, en pleno Camino de Santiago Mozárabe.

Hace unos pocos días, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente comunicó a la Junta de Extremadura que la refinería Balboa es “medioambientalmente inviable”. En la nota oficial, el Ministerio señala que además de que podría afectar notablemente al Parque Nacional de Doñana, ya que la refinería estaría conectada con Huelva por medio de un oleoducto, la refinería supondría “la afección al paisaje y al patrimonio cultural, ya que la refinería se sitúa en una parcela atravesada por la Vía de la Plata que forma parte del Camino de Santiago”.

El complejo petroquímico se proyecta construir en una parcela que atraviesa el Camino de Santiago Mozárabe, o Vía de la Plata, a lo largo de dos kilómetros. Curiosamente, el trazado aquí de este Camino está reconocido y señalizado por la propia Junta de Extremadura en el proyecto Alba Plata. El Camino jacobeo, a su paso por Extremadura, está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por la administración extremeña, y se encuentra en la Lista Indicativa española, del Ministerio de Cultura, dentro de la candidatura para su declaración como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Según la Plataforma Refineria no, la construcción de la refinería axfisiaría las posibilidades de que los pueblos afectados se beneficiaran del incremento paulatino de viajeros y peregrinos que utilizan este camino para llegar hasta Santiago de Compostela, ya que, posiblemente, primero las obras de construcción de la refinería y después la visón del propio complejo, disuadiría a los peregrinos de seguir esta ruta.