La parcela esta ubicada junto a la antigua carretera a Madrid.
Una empresa debe compensar a la Junta con 8 hectáreas por ocupar una cañada real
Junto a la antigua carretera de Madrid, en dirección a la autovía y justo en el límite con el Cerro Gordo, una empresa sevillana que compró un solar para construir sus instalaciones deberá compensar con ocho hectáreas al patrimonio público de la Junta de Extremadura por haber realizado la obra sobre una cañada real. Hay que tener en cuenta que este tipo de vía pecuaria se considera espacio público protegido, por lo que no puede existir ocupación alguna ni aprovechamiento de particulares sobre su trazado. Se trata de la empresa Benítez-Guillén, que tiene diversas instalaciones en España como mayorista de loza, cristal, cámping o menaje de cocina y que en el caso de Badajoz se dedicará a la venta de artículos de ferretería al por mayor y que en estos momentos está construyendo su nave.
Tras comprar la empresa el solar y comenzar las obras, técnicos de la sección de Vías Pecuarias de la Consejería de Desarrollo Rural de la Junta de Extremadura se percataron de que podían estar cometiendo una ilegalidad. Si bien esta empresa compró los terrenos con todos sus documentos en regla, nadie les advirtió de que sobre esa superficie discurría la cañada real de Calamón, Alcornoque y Torrequebrada al Charco de Aguas Frías, cuyo itinerario estaba por redefinir, como ocurre con otras tantas cañadas, veredas, cordeles o coladas del territorio nacional.Investigación minuciosaTras una trabajosa investigación a través de distintas fuentes como el Archivo de Badajoz, el Registro de la Propiedad, el Catastro o el archivo de la Asociación General de Ganaderos del Reino, entre otras bases de datos, los técnicos que trabajan para la Junta de Extremadura consiguieron deslindar la vía pecuaria y concluyeron que el terreno donde se había empezado a levantar la macro-ferretería estaba sobre una cañada real, que si bien no tenía los 75 metros de ancho reglamentarios sino aproximadamente 22 debido a una enajenación anterior, estaba igualmente protegida, indica el jefe de servicio de Desarrollo e Infraestructura, José María Carrasco. Por esta razón se emitió un informe que fue aceptado de buen grado por la empresa, desconocedora de esta circunstancia.Se trataba de ocho hectáreas que habían sido ocupadas equivocadamente, por lo que la empresa se verá obligada a compensar esta superficie 'invadida'. Este procedimiento se suele hacer de dos modos, bien por permuta o bien por modificación del trazado, si bien en la sección de Vías Pecuarias optaron por la segunda opción con el fin de mantener la continuidad del trazado de esta cañada.